Santa Marina de Jerusalén tiene una de las dos iglesias dedicadas en España en la localidad valenciana de Torrebaja y también hubo una reliquia en la antigua Iglesia de Santo Tomás Apóstol de Valencia que se hallaba situada en la esquina que forman la Calle de Cabillers y la de Avellanas y databa su consagración del año 1239. De esta iglesia, renovada como todas las demás de Valencia, no se conserva otra antigüedad que parte de su puerta principal de orden ojival que es una de las más notables de aquella época y cuyos capiteles se encuentran en el Museo de Bellas Artes. Al tiempo de hacerse la reedificación, la nueva pared cortó el sepulcro de Pedro de Prades y esto se advierte en la calle de las Avellanas. En el año 1837 pasaba el culto al oratorio de San Felipe Neri, situado en su límite parroquial, sirviendo durante los años posteriores esta iglesia como almacén, hasta que fue derribada en la segunda mitad del siglo XIX. Hoy su demarcación la ocupa la Iglesia de Santo Tomás y San Felipe Neri.
