El escultor Ignacio Vergara fue enterrado la capilla de Nuestra Señora de la Correa del Convento de los Agustinos de Valencia en Abril de 1776 ya que era miembro de la Cofradía de Nuestra Señora de la Correa que tenía su capilla fundacional en el convento. En la iglesia del Convento de San Agustín sus religiosos se enterraban cerca del altar mayor; los hermanos de la Cofradía de Nuestra Señora de la Correa lo hacían en una fosa abierta en la capilla de su patrona y los maestros del gremio de herreros en la que tenían en la capilla de su patrón, San Eloy. La advocación de la Virgen del Consuelo y Correa está directamente relacionada con la orden agustina que rigió el Convento y es común encontrarla en otros monasterios de la misma observancia. Según cuenta la tradición, la Virgen consoló a Santa Mónica, preocupada por la vida licenciosa de su hijo San Agustín. Adjuntamos los días de Comunión que tenía la cofradía. Adjunto un bello grabado.
