Nos cuenta el estudioso Mariano González que en el año 1753 Francisco Noguera, ciudadano influyente que procedía de Carcaixent, pidió que le fuese concedida una capilla en la girola de la Seo de Xátiva. En este lugar construyó a sus expensas un magnífico retablo de madera tallada y dorada para colocar un Santo Bulto de Jesús. La pieza tenía una estructura barroca de tres calles que flanqueaban dos imágenes de San Rafael y Tobías y San Francisco de Asís.