La ermita de San Antonio de Padua, o de la
Florida, es una ermita situada a
poniente de Crevillent en la partida de San Antonio de la Florida. Se
construyó en 1940 ya que, durante la contienda de 1936, un crevillentino prometió
a San Antonio de Padua que, si volvía sano y salvo a su casa, cedería parte de
sus terrenos para construirle una ermita. Como dicho paraje se denomina de la
Florida, a la ermita se la conoce como San Antonio de la Florida. La devoción
al santo fue en aumento y se constituyó una Junta que atendía a la ermita y a
la organización de la festividad. La fachada es de líneas rectas con frontón y
espadaña del mismo orden. La puerta en arco de medio punto, con cerco fajón y
un poyo a cada lado de la puerta, son los únicos adornos. La planta es rectangular.