martes, 6 de noviembre de 2012

GOZOS A NUESTRA SEÑORA DE LA PORTERÍA, venerada en el Convento de San Francisco de Callosa de Segura.



Nos cuenta Miguel Martínez como responsable de los museos de Callosa de Segura que la devoción a la hermosa, prodigiosa, y milagrosa imagen de Nuestra Señora de la Portería surgió con motivo de una promesa del entonces Guardián del Convento Alcantarino, Alonso Orozco. Estando gravemente enfermo en el año 1731, ofreció a una Purísima, entonces depositada en un trastero del convento que, si sanaba, le dedicaría una capilla y la colocaría de nuevo al culto. Se trata de la antigua imagen de la titular del convento, colocada en el altar mayor del mismo hasta su sustitución por la nueva en 1613. Al contar este convento ya con la advocación de la Inmaculada Concepción hubo de darle una nueva a esta imagen milagrosa antes de colocar. Alonso de Orozco, conocedor de la existencia de Ntra. Sra. de la Portería en Ávila, se decidió por esta advocación poniéndose como en otros casos varias advocaciones en un saco para sacar por sorteo y correspondiendo por tres veces a esta advocación. Fue el 22 de Marzo de 1734 cuando se decidió a colocar la imagen en el interior de la portería del convento pero las autoridades de la Villa, en nombre de todo el pueblo, pidieron que se colocara fuera para recibir la devoción de los callosinos ofreciéndose a sufragar una ermita. Aunque la decisión del Padre Orozco era firme, ante el aumento del clamor popular, se realizó un nuevo sorteo con dos cédulas iguales en un saco con las palabras “fuera” y “dentro”, saliendo por tres veces la palabra “fuera”. Por tal motivo, se construyó inmediatamente una ermita o capilla, junto al convento y cerrada con un reja de hierro.
La devoción duró desde 1731 hasta 1758 en que cesò todo el culto. Pero llegó el año 1798 y de nuevo el párroco de San Martín don Francisco Rato Peláez, recuperó con toda solemnidad la fiesta para la Virgen de la Portería. La costumbre nos habla de que la imagen no puede procesionar mas allá de la Rambla por el aumento descomunal de peso del trono. Desde los años 60 es la Virgen de la Portería, moderna talla de los talleres de Olot,  la que sale enlutada al encuentro de Cristo Sacramentado el Domingo de Gloria por la mañana.