La ermita de la Virgen del Loreto de la calle del mismo nombre, en Jérica, perteneció en tiempos a un hospital de pobres al que se encontraba adosada. Este es un pequeño edificio de estilo popular, con dos partes bien diferenciadas: la capilla original y un atrio previo de factura posterior, ya que el primitivo era de madera y fue destruido. Cuenta con amplias ventanas de forja para permitir la asistencia al culto. Su espadaña es nueva sobre la portada adintelada con dovelas de sillería. Tiene capilla y una sacristía a la que se accede por una puerta igual a la de entrada. La primitiva cubierta debió ser de crucería. En dicha calle, durante el verano, se celebraba el 8 de Septiembre una misa solemne a la que acudían infinidad de fieles devotos que ocupaban el recinto de la ermita.