El Calvario de Figueroles es bastante pintoresco ya que consta de catorce capillitas en medio de las cuales había un olivo enorme que data de los siglos XVII y XVIII. Su fiesta viene celebrándose desde finales del siglo XVII y en ella la religiosidad impregna sus calles con una multitudinaria procesión que sube desde la iglesia parroquial hasta la Ermita del Calvario, se cantan los gozos y se dispara un espectacular castillo de fuegos artificiales. Finaliza el emotivo acto cuando los numerosos devotos le besan los pies al Cristo, cuya imagen ha sido siempre invocada contra pestes y sequías. La imagen actual fue tallada en el año 1940 por el prestigioso escultor valenciano José María Ponsoda tras la destrucción de la anterior en el año 1936. Adjuntamos el reverso de los gozos.