La ermita de los santos Crispín y Crispiniano de Elda, patronos de los zapateros a los que se procesiona, se construyó en 1951 en el entorno de un amplio parque. El edificio es exento, construido con muros de mampostería y tejado a dos aguas con teja plana. Se accede por una escalinata de 4 peldaños y la fachada tiene una parte central o portada y dos laterales lisas. Sobre la puerta ostenta el nombre del titular "Ermita de San Crispín" y la fecha de su inauguración. Tienen otra ermita dedicada en la Partida Carrús de Elx.
San Crispín y San Crispiniano eran dos nobles romanos que fueron enviados a evangelizar las Galias, por lo que son considerados los apóstoles del Norte de Francia. Para no ser una carga para sus fieles se mantenían ejerciendo el oficio de zapateros y de ahí viene su patronazgo sobre ese gremio. En la persecución de Diocleciano, después de atroces tormentos que soportaron estoicamente, fueron decapitados. Sus cabezas se veneran en Roma, en la iglesia de San Lorenzo mientras sus cuerpos quedaron en Soissons.