El Niño Jesús de Praga es popularmente venerado en la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, de los Padres Carmelitas, en la calle Alboraya de Valencia. Y es que las huertas de esta zona de la ciudad eran propiedad de los Carmelitas Descalzos y sobre ellas se levantaron el Convento y la Iglesia. Cuando el Ayuntamiento de Valencia decidió abrir la actual calle de Alboraya sobre los terrenos carmelitanos tuvo que permutar la actual iglesia de San Juan de la Cruz, anterior iglesia de San Andrés, por éstos solares, motivo por lo cual lo que era la bella y magnífica iglesia de San Andrés está regentada hoy por los Padres Carmelitas.
Su devoción en Valencia es muy antigua y hoy mantiene la bella capilla del templo parroquial con interesantes frescos obra de Isidoro Garnelo. Esta fue la primera capilla que se hizo en el templo pues fue inaugurada en 1907. Igualmente, la localidad valenciana de Petrés le tiene en gran devoción por ser patrón de los niños.
