En el año 1597 se fundaba y se erigía en Valencia el Convento de religiosas servitas o siervas de María, bajo el título de Nuestra Señora de los Dolores y en él se celebró la primera Misa el día 3 de Mayo, día de la Invención de la Cruz, por lo que vino a llamarse “Convento de Nuestra Señora de los Dolores al Pie de la Cruz”, conocido popularmente como el “Convento del Pie de la Cruz”. Su fundación se hacía en pleno centro de Valencia, intramuros de la ciudad, no muy lejos del importante Convento de la Puridad y frente al edificio del antiguamente suntuoso Palacio de Parcent del que hoy nos quedan sólo sus jardines como recuerdo. Del convento, por encontrarse en ella, tomaría nombre la Calle del Pie de la Cruz. Era este un convento angosto y pequeño que fue afectado por la desamortización de Mendizábal y que un bombardeo en el año 1873 obligó a rehacerlo. También fue incendiado en el año 1936 y por ello desaparecieron muchas de sus obras de arte hasta que fue demolido finalmente en el año 1940 y se trasladaron sus monjas a un convento en Mislata.
Hoy aquel espacio lo vemos
ocupado por casas particulares. Esta imagen de la Virgen de los Dolores
es la que dio nombre al convento. La Virgen de los Dolores
frecuentemente aparece representada en el momento de la Piedad con su hijo Jesús
muerto sobre su regazo tras el descendimiento o con expresión de desconsuelo al
pie de la Cruz, sosteniendo sedente la corona de espinas de su hijo. En otras
ocasiones se la representa con una o siete espadas que le traspasan el corazón.