viernes, 26 de octubre de 2012

GOZOS A NUESTRA SEÑORA DEL SUFRAGIO DE LAS ALMAS DEL PURGATORIO, venerada en la Iglesia de la Santa Cruz de Valencia.


Como dijimos, la Iglesia de la Santa Cruz de Valencia fue agregada a la iglesia del Convento del Carmen cuando se produjo la exclaustración de aquella a mitad del S.XIX por las leyes desamortizadoras y por amenazar ruina y ser demolida por tanto en el año 1844. Su singularidad principal era la de que en ella se albergaba desde el año 1314 la llamada “Cofradía de los Ciegos”, que fue anteriormente una antigua ermita que contuvo el cuerpo del pintor Juan de Juanes y que fue una de las catorce que existieron en la ciudad foral. Esta era una institución de carácter gremial que se dedicaba a la atención de los ciegos ofreciéndoles sus enseñanzas e instándoles a la oración, por lo que alcanzó gran fama. En ella se les adiestraba en el uso de la guitarra y del violín y, tras superar su aprendizaje, los “ciegos oracioneros” lograban su medio de vida participando en aquellos actos, tanto litúrgicos como civiles, en los que eran requeridos. Hoy, la Plaza de la Santa Cruz es un amplio lugar en el que destaca una cruz de hierro adosada a una columna de piedra como sencillo, pero significativo, monumento en su recuerdo parroquial.
La advocación de la Virgen del Sufragio de las Almas fue la patrona de la Cofradía de las Almas del Purgatorio que aquí tuvo su sede y capilla y era invocada para el buen fin del parto. Su actual imagen es obra del escultor Leonardo Capuz y adjuntamos su grabado. La Imagen pasó a la Iglesia del Carmen en la exclaustración de su convento. En el año 1940 se instaló en el altar de la Capilla de la Comunión, reemplazando a la de la Virgen de los Desamparados que sí se quemó y, en la actualidad, está en el altar mayor de la iglesia bajo un dosel que tapa ciertas figuras predemocráticas. La imagen está esculpida solo por delante ya que por su parte trasera sigue siendo un tronco de árbol. La mano derecha sostenía un ancla de barco que se perdió en los traslados, posiblemente en la guerra. Tuvo esta advocación una antigua cofradía en Xátiva para pedir por las almas, culto que fue apoyado por el Papa Alejandro VI Borja.