El culto a la Vírgen de la Fuente en Castellfort está documentado desde antes del S.XV pues existió un peirón con su imagen insertada. Ya a finales de este siglo hubo un ermitorio que se situaba junto a una cueva de la que emerge un manantial al que sustituyó el actual. El ermitorio actual es un conjunto conformado por la Iglesia-Hospedería, la Cofradía y un Porche, que se encuentran formando un recinto, cerrado y defendible. En el interior destacan unas pinturas murales monócromas en las que se representan las vidas de Jesús y la Virgen, pintadas en 1597 por el artista Cerdá.
Su imagen es gótica del S.XIV, de barro cocido y mide palmo y medio. La tradición dice que durante la invasión árabe cinco vizcaínos escondieron la imagen y regresaron a su tierra.Con la reconquista cristiana un descendiente de aquellos regresó a Castellfort y siguiendo unas voces y unas estrellas localizó el lugar en que se escondió la talla. En el año 1664 se libró a la población de unas fiebres malignas . En el año 1938 la talla se encontró rota en un saco junto con exvotos en dependencias municipales y fue restaurada tras la guerra civil. Es una réplica exacta de la Vírgen de la Vallivana del S.XIV. Adjuntamos el reverso de estos gozos y un video con su canto.
