Andrés Hibernón, nacido en
Murcia en el año 1534 y fallecido en
Gandía en el
1602, fue un
religioso franciscano español que fue beatificado en el año 1791. Entre las actividades conventuales que realizaba en
el Convento de San Roque de
Gandía se encuentran los oficios de portero y limosnero. También lo fue en el
Convento de San Juan de la Ribera de
Valencia. Siempre destacó por su humildad, sencillez, capacidad de realizar la conversión de moriscos y espíritu de sacrificio. Su
cuerpo incorrupto permaneció en el convento y luego en la iglesia del mismo nombre hasta que al inicio de la Guerra Civil fue destruido. Los restos recuperados y ocultos durante la contienda, fueron trasladados finalmente a
Alcantarilla, donde es patrón, y a la
Catedral de Murcia, donde tiene una
capilla y
altar dedicadas. En
Gandía tiene también una
capilla con
azulejo rotulado y una preciosa
estatua en la calle frente a ella. Adjuntamos un grabado de su
estancia en Gandía y otro de su
estancia en Valencia.