Alcalá de la Jovada es un pueblo acogedor que tiene al pie de la iglesia dedicada a la Purísima Concepción y sucesora de la antigua mezquita una fuente con el rostro del caudillo Al Azraq que perdió la vida luchando por los derechos de los moros contra el conquistador Jaime I de Aragón. Sin embargo la patrona de la población es la Virgen del Pilar. Lo más curioso de la fisonomía de esta iglesia es que se halla tapiada a la altura de su campanario por una casa que inicia uno de los lindes de la actual Plaza Mayor. Los despoblados de alrededor de Alcalá de Jovada es todo lo que queda como restos de la población árabe que vivió aquí durante nueve siglos. En efecto, en el año 1.609 todos sus descendientes fueron desterrados de España y expulsados hacia Africa del Norte.