El origen del posterior Convento de Santa Ana de la actual Calle Navellos de Valencia fue una pequeña
ermita dedicada a esta santa junto a la cual en el año 1341 ya vivían en
comunidad algunas mujeres carmelitas terciarias en un beaterío. El hecho es que desde 1239 el rey D. Jaime
cedió este terreno al recogimiento de una porción de mujeres devotas o sórores que, aumentado con la propiedad de una casa
contigua que vendió su dueño Juan Esteve Mercader en 1514, sirvió para el
beaterio indicado. Pero el posterior establecimiento databa de 1564 en que fue
convertido en clausura por el celo de Sor Isabel Sánchez, religiosa de la
Encarnación, con el nombre de Convento de Carmelitas Calzadas de la Encarnación.
Según el libro de aquel monasterio de monjas carmelitas bajo la advocación de
los gloriosos santos San Joaquín y Santa Ana, que se conserva en el actual Convento de la Encarnación, su fundación data del 16 de Julio de 1586. El
convento, a pesar de estar dedicado a San Joaquín y Santa Ana, era conocido por
todos como el Convento de Santa Ana.
En dicho convento se fundó la Cofradía de Santa Ana y San
Joaquín, siendo una cofradía muy numerosa y próspera. Con la desamortización de 1837 la comunidad de veinte religiosas, pasaron al Convento de la Encarnación, su origen, con la
Cofradía de Santa Ana y su preciosa imagen, destruida en 1936. Aquel se
convirtió entonces en casa-galera para
mujeres reclusas. Ya en el 1878 un particular edificó un chalet en el solar
donde estaba dicha prisión y en el 1891 se inauguró aquí el llamado Colegio del
Sagrado Corazón de Jesús de las Hermanas Carmelitas de la Caridad, orden fundada
por Santa Joaquina de Vedruna. Todo el conjunto es neoclásico y tiene tres
grandes puertas en la fachada principal, siendo la central para acceso al
Colegio, la de la izquierda de acceso a la iglesia que preside la imagen del
Sagrado Corazón de Jesús y tiene dos capillas laterales dedicadas a la Purísima
y a la santa fundadora. La puerta de la derecha es para acceso del alumnado. En
la actualidad, en la Iglesia del Convento de la Encarnación, en memoria de la
Cofradía, existe un altar dedicado a San Joaquín y Santa Ana del que adjuntamos anverso y reverso de una estampa conmemorativa.