La iglesia de Santa Ana de Borbotó data del siglo
XVII y dependió de la iglesia de Carpesa hasta 1942. De
cruz latina, se compone de tres naves y cinco tramos. La decoración data
principalmente del siglo XIX, destacando el retablo mayor del misterioso Maestro
de Borbotó, de principios del siglo XVI. Está compuesto por nueve tablas
de estilo renacentista, con la imagen central de Santa Ana, que se
completa con otros personajes bíblicos. Destaca asimismo el llamado Quadro
de les Ànimes, de finales del siglo XV, que representa la ciudad celestial
y el juicio final. En las fiestas del Cristo de la Luz, las más populares
en la pedanía, se realizan los actos litúrgicos tradicionales, y otros lúdicos
como el día de las calderas, cuando todos los clavarios y vecinos disfrutan de
las calderas de arroz con “fesols i naps” en fraternidad.